Humedades en Casa

Tipos de humedades en casa, causas de las humedades y soluciones de aislamiento e impermeabilización


La humedad es uno de los principales agentes de degradación de los elementos constructivos. Una de las más frecuentes es la que se produce por condensación.
Es de sobra conocido que la humedad de condensación se produce cuando el vapor de agua del aire entra en contacto con una superficie fría –una pared mal aislada, una zona poco ventilada o carente de calefacción, etc.– y éste se licúa. Como consecuencia, aparecen manchas de humedad, un excelente caldo de cultivo para la generación de hongos y comienza el deterioro de la superficie. A ello hay que añadir la contaminación ambiental y el riesgo de alteración de la salud de las personas que utilizan la estancia.

Las causas que pueden conducir a la aparición de humedad de condensación son varias y todas ellas están relacionadas. En primer lugar, se encuentra la ausencia de ventilación inadecuada. Una renovación puntual pero no continua del aire de la habitación, la aireación con aire excesivamente frío, el exceso de producción de vapor de agua o el exceso de renovación, son formas de ventilación inadecuada y factores potenciales de manifestación de humedades.
Una segunda causa puede ser la falta de calefacción o su empleo incorrecto, bien por un exceso de uso –la utilización de un combustible generador de excesivo vapor de agua de combustión (butano, propano, petróleo), una distribución inapropiada de la temperatura en la habitación y en la vivienda o local– o la colocación de la caldera en un lugar inconveniente, como habitaciones poco ventiladas o lugares con corrientes que llevan el aire quemado hacia el interior.

La ausencia de aislamiento, o su existencia, pero con el tipo incorrecto, constituyen un tercer factor de riesgo y posible origen de humedad. Efectivamente, un aislamiento térmico insuficiente entre los elementos constructivos exteriores e interiores y la falta de medios de aislamiento hidráulico exterior que canalicen y expulsen todo el agua y la humedad que entren en contacto con el edificio, también pueden dar lugar a este tipo de humedad.